7.1.08

otra cosa que sufrir Economía.

El verano de 2008 quedará en mi memoria como esos días de mierda en los que no hice otra cosa que sufrir Economía.

Pero además, entre los costados de esos recuerdos, quedarán un par de charlas sobre lo que no es más que esa otra construcción, esa elucubración que (al igual que la economía) intenta modelar una realidad inmodelable.

He envejecido entre diálogos (no quiero decirlo pero es la palabra perfecta) vicentinos. Y lo que queda es sólo duda.

No hay nada escrito (o al menos no he leído nada) sobre la teoría del asco de FG. De los diálogos sólo puedo reconocer ese odio que a uno le queda. Yo detesté la teoría desde que G la propuso. Yo sufrí cada dato que él compiló para defenderla.

¿Pero cómo hacer que la gente vea eso? ¿Por qué sufrir el arte si no tiene resultado tangible en la sociedad? ¿Fe en un futuro distinto a este presente precario y apocalíptico? ¿Para qué?

Cada día el mundo nos hace más insensibles a todo. Y como consecuencia a ese juanete de emociones, ese cayo en la melancolía, el asco gana caminando una carrera que debería ser el único sentido de nuestras vidas.

Pero lo que más jode es que no haya esperanza. Lo que más choca es que, a medida que perdemos hombres en esta batalla, el vulgus se pierde en una insensibilidad que le impide no sólo repudiar el asco, sino que, para peor de peores, no permite apreciar el anti-asco.

Y no entender que los contornos también albergan esencia es malo para todos. Porque para que ese anti-asco sea apreciable hay que decir cuidado, ahí hay arte.

(Be Award. There’s art)

Gracias por el espacio, Grasso. Usted es otro de esos. Y espero paciente el manuscrito anticipado del Libro 10 con la teoría del asco desarrollada.

Termino como empecé, recordando momentos que conmueven:

There’s a Light that never goes out

Take me out tonight

Where theres music and theres people

And theyre young and alive

Driving in your car

I never never want to go home

Because I havent got one

Anymore

Take me out tonight

Because I want to see people and i

Want to see life

Driving in your car

Oh, please dont drop me home

Because its not my home, its their

Home, and Im welcome no more

And if a double-decker bus

Crashes into us

To die by your side

Is such a heavenly way to die

And if a ten-ton truck

Kills the both of us

To die by your side

Well, the pleasure - the privilege is mine

Damián M. Díaz

1 comentario:

FG dijo...

nota al respecto:
Damián Díaz recursó Economía y Empresa en 2008.